Reflexiones de Daniel Estulin.
Y yo añadiría, al final de su discurso, que quizá es que también -aparte de la respuesta que el proporciona- acaso, dentro de la humanidad en su conjunto, tales -y más que vitales- preguntas, se habían olvidado.
Está bien recordarlas en esta tarde de verano, y no sólo a nivel general como raza humana, sino a nivel particular, de cada individuo.
¿Quiénes somos en realidad?
¿Por qué estamos aquí?
¿Hacia dónde vamos?
¿Hacia dónde vamos?
No creo que muchas personas, a esta última pregunta, contesten que
hacia donde se nos haga sufrir.
No construyamos un valle de lágrimas sino un paraíso feliz, no en el sentido de Huxley sino en el del más pleno Vivir, que es lo que siempre se propone aquí.
Anna.
5.8.20